Un paseo (LIBRE)

Los deberes me habían estresado y las clases me habían parecido un poco pesadas, supuse que era por el hecho de que me había acostumbrado que no vayan los profesores. Siempre se me hacía densa una clase pero, había cosas que si no las aprendía, era básciamnete darme por muerte. Sonreí al pensar como mi padre.
Caminaba sin rumbo por los pasillos, con la mente en cualquier lugar. La verdad es que se suponía que Hogwarts no debía aburrirme pero lo estaba haciendo y cada vez más seguido, eso era tan raro que ni yo podía creerlo.
Los grandes pasillos del colegio estaba completamente vacíos en esta tarde, podías ver algún que otro alumnos pero nada más, parecía sin vida, lo cual me sorprendió por un momento. ¿Desde cuando Hogwarts sin vida? Supuse que el problema no era Hogwarts si no que lo era yo.

Miré a un alumno cuando me detuvo por los pasillos para saludarme y presentarme. Gryffindor, suspiré y escuché su discurso "espero que nos llevemos bien sin importar la casa". Lo de las casas ya lo había dejado atrás o eso quería, eso intentaba. Lo miré detenidamente, parecía más chico, tenía un rostro de niño extremadamente niño.
- Hola Dean- saludé- Soy Emma.

Le tomé la mano por respeto para seguir caminando, si el quisiera acompañarme que lo haga y si no, bueno que no lo haga. Tenía hambre por lo que pasaría por el desayuno del gran comedor.
- Bien -contesté- y Tú?

- A buscar unos bocadillos y luego a la Biblioteca- contesté deteniendo mi paso- Ya sabes, los deberes son estresantes- me encogí de hombros y tiré un mechón de mi cabellera hacía atrás.
-¿Vienes?

Sonreí remontando mi paso hacía el gran comedor.
- ¿Eres nuevo? Nunca te había visto- siempre hacía ese estúpido comentario, si de todos modos no me fijaba en nadie, nadie llamaba mi atención y menos los nuevos. Suspiré recordando como era que había conocido a todos mis amigos hasta el momento, ninguno me había llamado la atención en primer momento.

- Lo es -alenté su comentario.
- ¿Y cuantos años tienes? ¿A que año entraste?
Miré hacía unos chicos de Ravenclaw que me miraron de mala gana, ni los miré.

Lo miré con añoranza.
-Eres de los pequeños-reí bajito entrando al gran comedor.
-Esperame aqui... -me acerqué a la mesa de Slytherin y tomé algunos bocados en un plato saludando a algunos compañeros. Desayunaría dentro de la Biblioteca, no sabía si se podía pero lo haría de todos modos.

Lo miré de mala gana empezando a caminar hacía la salida del gran comedor con un par de tortitas.
- Nunca más se te ocurra acercarte tan deliberadamente a la mesa de Slytherin ¿Entiendes? -sonreí con malicia mientras caminaba hacía la biblioteca.
- Se supone que nos tenemos que llevar terriblemente, pero yo estuve cambiando este año... lo suficiente como para por lo menos dirigirte la palabra.